La diputada de Lanzarote y su paradoja: Apoya amnistía a líderes catalanes desafiando la ley
Foto. Dolores Crujo esta mañana junto a otros diputados socialistas aplaudiendo el discurso de Sánchez
S.Calleja
La reciente postura de Dolores Corujo Berriel, diputada de Lanzarote, en relación con la amnistía de los políticos catalanes involucrados en el proceso independentista, plantea serias dudas sobre la coherencia y los principios que deben regir la política española. Su defensa de la amnistía, bajo el argumento de la "fortaleza de la democracia", parece más un ejercicio de retórica política que un compromiso genuino con los valores democráticos.
Corujo Berriel argumenta que la democracia se basa en la convivencia y el respeto a las diferencias, lo cual es cierto. Sin embargo, su apoyo a la amnistía para aquellos que han desafiado la legalidad constitucional española parece contradecir estos mismos principios. La democracia no solo se sustenta en el respeto y la convivencia, sino también en el respeto a la ley y al orden constitucional.
La diputada señala que el conflicto catalán es un conflicto político, lo cual es una simplificación de una cuestión mucho más compleja. Si bien es cierto que el rechazo del Estatuto de Autonomía de Cataluña por parte del gobierno de Rajoy exacerbó el sentimiento independentista, esto no justifica la unilateralidad y la ilegalidad de las acciones posteriores por parte de los líderes independentistas catalanes.
Además, Corujo Berriel parece olvidar que la democracia también implica responsabilidad y consecuencias. La amnistía a políticos que han cometido actos ilegales en su búsqueda de la independencia catalana no solo socava el principio de igualdad ante la ley, sino que también envía un mensaje peligroso de que se puede desafiar la ley sin enfrentar consecuencias.
La diputada también critica a la derecha española, acusándola de generar conflictos territoriales por incapacidad de gobernar en regiones como Cataluña y el País Vasco. Esta acusación ignora la complejidad de la política regional y los múltiples factores que influyen en el apoyo a los partidos políticos en estas regiones.
Por último, la afirmación de Corujo Berriel sobre la amnistía como una herramienta de izquierda es cuestionable. La verdadera izquierda busca la justicia social y la igualdad, no la exención de responsabilidad para políticos que han actuado fuera de la ley. La amnistía en este contexto parece más un acto de conveniencia política que un compromiso con los principios de justicia social.
La postura de Dolores Corujo Berriel sobre la amnistía a los políticos catalanes independentistas y su interpretación de la democracia y la justicia social plantean serias preguntas sobre su coherencia y compromiso con los principios democráticos. La política debe basarse en principios firmes y coherentes, no en conveniencias y retórica vacía.